La erogación del servicio es de forma libre, sin ningún tipo de limitación en cuanto a cantidad de consumos por empleado. La máquina funciona sin monedero, evitando de esta manera la circulación de fichas. Se factura en base al estado de los contadores de las expendedoras.
Se contrata una cantidad de consumos (servicios) mínimos por mes, de acuerdo al presupuesto asignado por la empresa para este rubro, los cuales serán suministrados en cospeles a principio de mes. En caso que el personal quisiera acceder a un consumo extra, lo efectuaría a través del uso de monedas de curso legal. Para ello nuestras máquinas están provistas de monederos y/o billeteros electrónicos.
Se acuerda un monto a cargar en cada llave el cual se renovará automáticamente el primer día hábil del mes. La empresa contratante abona mensualmente el crédito acordado para cada llave.
El empleado tiene acceso a los productos a precios menores a los del mercado, pues el costo final se encuentra subvencionado por su empresa. Se determina el consumo efectuado por el personal sobre la base de los contadores de las máquinas y se factura mensualmente la subvención a la empresa.
El usuario es quien abona su propio consumo. El precio de venta se establece en común acuerdo entre nuestra empresa y la empresa contratante. Se le ofrece a los empleados una mejora dentro de su ámbito laboral, pues tienen a su disposición un producto a un precio menor del que lo podrían adquirir fuera de la empresa.